Este diseño personalizado hace que el pequeño se sienta como una estrella. El topper, con la silueta  del cumpleañero pateando un balón y su nombre, lo convierte en el protagonista absoluto. Acompañando esta escena, encontramos esferas de chocolate dorado que simbolizan cuatro (4) balones de oro, un detalle que hará las delicias de cualquier fanático del fútbol. La decoración se completa con tres pelotas de trufa, todas con el aspecto de auténticos balones de foodball, y un hexágono en la parte frontal donde destaca la edad del cumpleañero. La combinación de blanco y negro, colores característicos del Real Madrid, el equipo favorito del niño, aporta un toque final de autenticidad y personalización a este pastel único. 

En cuanto al sabor, hemos elegido el favorito del cumpleañero: un esponjoso y húmedo bizcocho de vainilla con un sutil toque de naranja, relleno de cuatro capas de buttercream con lluvia y gotas de chocolate bitter.

En este día radiante, donde la fe y la alegría se unen, celebramos la Primera Comunión de nuestro hijo. Para endulzar este momento tan especial, hemos preparado una mesa de dulces exquisita, llena de detalles que evocan la pureza, la espiritualidad y la dicha de este sacramento.

Como pieza central, se alza majestuosa una torta de dos pisos, vestida de un elegante manto azul fondant. Este color, símbolo de la paz, la serenidad y la espiritualidad, representando los valores fundamentales que se reciben en este día sagrado.En la cúspide del pastel, un angelito  que representa inocencia y la pureza. En el frente del segundo piso, una cruz dorada brilla con resplandor, símbolo inquebrantable de la fe cristiana. Su presencia nos invita a reflexionar sobre la importancia de este sacramento y el amor incondicional que Dios nos brinda.

Para complementar esta dulce sinfonía, hemos creado una selección de minipostres personalizados, elaborados con esmero y cariño. Galletas, cupcakes o brownies con formas alusivas a la Primera Comunión, como cruces, ángeles, hostias o cálices, decorarán la mesa con detalles encantadores.

Los amantes del sabor clásico podrán deleitarse con nuestros minicupcakes de red velvet, reinventados con un toque especial. Su frosting de queso crema blanco, fondant azul y finas cruces de perlas comestibles blancas crearán una experiencia deliciosa e inolvidable.

Para los paladares más exigentes, ofrecemos nuestras Lacepops, unas paletas de chocolate blanco decoradas con finos detalles en azul, blanco y dorado.  aportan un toque de elegancia y diversión a la celebración. Su crujiente exterior y su cremoso interior son una explosión de sabor que conquista a niños y adultos por igual.

Los amantes de los postres frescos y ligeros encontrarán su paraíso en nuestras mini porciones de Pavlova. Este postre a base de merengue, cubierto con crema batida fresca y fresas, aportará un toque de frescura y dulzura a la celebración.

Y para finalizar con broche de oro, nada mejor que nuestros Shots de 3 leches. Pequeños vasitos de cristal albergan un cremoso postre de tres leches, perfecto para un final refrescante y delicioso.

Más que una simple mesa de dulces, esta creación es un reflejo del amor, la dedicación y la alegría que sentimos en este día tan especial. Cada detalle ha sido cuidadosamente elaborado para que todos  recuerden este momento como una celebración llena de fe, felicidad y dulces recuerdos.

Un lienzo de sabor: Imagine una majestuosa torta de bodas que se despoja de la pretensión del glaseado elaborado, revelando capas de bizcocho esponjoso y relleno cremoso. Esta es la esencia de la torta semi desnuda, una tendencia que ha cautivado a los paladares más exigentes.

Sabor cítrico que enamora: En el corazón de esta creación se encuentra una deliciosa crema de limón, que aporta un toque ácido y refrescante a cada bocado. Su sabor cítrico se entrelaza a la perfección con la dulzura del bizcocho, creando una explosión de sensaciones que conquistará a los amantes de los postres.

Un jardín floral: La belleza de esta torta no se limita a su sabor. Adornada con rosas y clavelitos, flores que simbolizan el amor eterno y la devoción, se convierte en un espectáculo visual que cautivará a sus invitados. Los colores vibrantes de las rosas y la delicada fragancia de los clavelitos complementan a la perfección la estética rústica y elegante de la torta.

Un toque final encantador: Para un detalle aún más especial, la base de la torta se engalana con cintas, invitando a todas las solteras a descubrir el dije  Un detalle sutil que añade un toque de romanticismo y sofisticación a la composición. En última instancia, la decisión de incluir o no el juego de la cinta en tu boda depende de ti. No hay una respuesta correcta o incorrecta, y lo más importante es que tú y tu pareja estén felices con su decisión.

Más que una torta, una experiencia: La torta semi desnuda de bodas con crema de limón, rosas, clavelitos y cintas para el dije no es solo un postre, es una experiencia. Es un símbolo del amor puro y duradero, representado en la sencillez elegante de sus ingredientes y la delicadeza de su decoración. Un deleite para los sentidos que hará de su boda un evento inolvidable.

La torta semi desnuda de bodas con crema de limón, rosas, clavelitos y cintas para el dije es una opción única y deliciosa para celebrar su amor. Su sabor fresco, su decoración elegante y su significado simbólico la convierten en el centro de mesa perfecto para un día tan especial.